Consejos para comprar alfombras antifatiga

Hay muchos tapetes antifatiga en el mercado, algunas de las cuales están diseñadas para su uso en un entorno industrial en el que los trabajadores permanecen de pie durante horas en el mismo puesto de trabajo, mientras que otras tienen una naturaleza más ligera destinada al trabajo ligero en el entorno doméstico.

Pero muchos pasan innumerables horas en la cocina de casa, en el garaje o en el taller mientras hornean, cocinan o hacen chapuzas. Y esto puede suponer el mismo estrés indebido para sus pies y su cuerpo que para el trabajador industrial. Si el suelo es muy duro, como las baldosas de cerámica, incluso estar de pie durante una hora puede ser agotador.

La solución es una alfombra antifatiga adecuada y bien diseñada que puede reducir el estrés de los pies y los problemas de espalda y rodilla relacionados. Pero con tantas opciones en el mercado, puede ser difícil encontrar la adecuada para sus necesidades particulares. Estos consejos le ayudarán a comprar una alfombra antifatiga.

¿Necesita una alfombra antifatiga?

Admitámoslo; siempre es agradable pisar una alfombrilla suave y cómoda cuando te levantas de la cama, o estás de pie junto al lavabo. Pero aunque la suavidad y la ligera amortiguación puedan parecer cómodas, pueden no ser adecuadas para reducir el riesgo de estrés y fatiga de los pies, cuando se trata de estar de pie en el mismo sitio durante una hora o más.

Esta amortiguación es limitada en lo que respecta a las cualidades de absorción de impactos y alivio de la tensión. Cuando se necesita algo más que una amortiguación blanda, es el momento de adquirir una alfombra antifatiga. Cualquiera que sufra de dolor de pies, rodillas o espalda debería considerar algún tipo de alfombrilla antifatiga, para reducir la tensión en el cuerpo causada por estar de pie durante cualquier periodo de tiempo en la encimera de la cocina, el fregadero del baño o el banco de trabajo.

Alfombrillas normales frente a alfombrillas antifatiga

Cuando lo único que se necesita es un poco de amortiguación, las alfombrillas de moqueta son probablemente las más económicas y pueden ser suficientes para trabajos ligeros si tienen un soporte de goma para la seguridad. Pero asegúrese de que son lavables y que soportan muchos lavados.

También hay una buena variedad de alfombras de goma o espuma con revestimiento de vinilo para uso doméstico, pero éstas pueden carecer de propiedades antifatiga y limitarse a proporcionar una ligera amortiguación. Las alfombras de goma entrelazadas que se venden en las ferreterías para talleres o áreas de juego también pueden ser muy prácticas y económicas para trabajos ligeros, dependiendo del uso.

¿Y las alfombras de gel?

Ciertamente vale la pena considerarlas para trabajos ligeros. A mucha gente le encantan las plantillas de zapatos rellenas de gel, así que este concepto puede extenderse sin duda a la cocina. Es realmente una cuestión de gusto y de cómo se siente uno. Las alfombras antifatiga rellenas de gel suelen tener un precio mucho más elevado y esto puede ser una limitación. Dado que las alfombras de cocina pueden sentar muy bien a una persona y a otra no, ten en cuenta que puede ser necesario probar y equivocarse para encontrar la adecuada para ti.

Los tapetes antifatiga suelen tener algunas cualidades para aliviar el estrés, pero no todos son iguales en cuanto a materiales, características y beneficios. Algunas se consideran ligeras, mientras que otras tienen propiedades industriales que las hacen más adecuadas para un uso intensivo. Y para aquellos que pasan horas en la cocina o en la tienda de casa, este es el tipo de alfombra antifatiga que necesitan.

Una alfombra antifatiga de grado industrial debe tener un grosor de al menos 3/8 de pulgada y estar construida con propiedades especiales para aliviar la tensión de los pies. Consulte más abajo para obtener más información sobre la densidad. Busque un patrón superior que sea fácil de limpiar y un tamaño adecuado para su área. Aunque una alfombra antifatiga de alta resistencia puede no ser tan bonita como algunas alfombras de cocina, recuerde que lo que cuenta es la calidad, y eso es una pequeña compensación cuando se trata de aliviar el dolor de pies. El negro es el más fácil de encontrar; los colores son más limitados. Prepárate para pagar por este tipo de alfombrilla; suelen ser más caras.

Aspectos sanitarios y de seguridad

Independientemente de que elija una alfombrilla simplemente por su ligera amortiguación o por su uso intensivo, si la alfombrilla es para la zona de la cocina o el baño, por razones sanitarias debe ser lavable. Las alfombras de cocina pueden albergar bacterias de los alimentos y las alfombras de baño son propensas a los gérmenes y deben limpiarse regularmente.2

Una alfombra antifatiga con una superficie cuadriculada o con muchos guijarros es ideal para el uso industrial, donde se puede lavar con manguera, pero puede ser difícil de mantener limpia en la cocina. Cuando la capa superior de una alfombra se agrieta o se descascarilla, la limpieza se vuelve ineficaz, y la alfombra debe ser sustituida. Lea la información del producto y, por motivos de salud, asegúrese de que puede lavarlo o desinfectarlo.

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